Ha habido en el mundo de la cesta-punta profesional pelotaris que no han sido grandes figuras, sin embargo, han dejado su impronta, dicho de otra manera, han dejado huella de su paso.
Uno de ellos es José Ramón Eizaguirre, conocido también como: “Fraypa” o “El Filósofo de Berriatua”, éste último apodo impuesto por el que fuera gran cronista de pelota: Juan de Irigoyen. Continue reading
(Tampako pilotariak, Demetrio Mandiolaren elizkizunetan, 1960)
So you are a jai-alai player..? irribarretsu. Edadekoa zen gizona. Piszinaren ondoan bizi zen, ikusia baneukan gurditxoan bere apartamentutik irteten. Guk, bazkaldu aurretik, ordubete edo ematen genuen piszinan, baino bat hartu, karramarroen moduan eguzkitan egon; ez gehiegi; izan ere, Floridan, udaberrian, bero sapa egiten baitu, eta ez da komenigarria kirolari batentzat eguzkitan egotea, nerbioa jan egiten dizu, erabat ahulduz. Continue reading
Gauero larrosa bat aurkitzen nuen autoaren aurre aldeko kristalean, parabrisasan –artean, Tampa Jai-Alai-ean ari nintzen jokatzen, 1978an. Frontoiko funtzioa bukatu, dutxa hartu eta gero, aparkalekura abiatzen nintzen automobilaz etxera joateko. Han izaten nuen larrosa lorea nire esperoan. Eguna joan, eguna etorri, gauerdian gertatzen zen; bi hilabete iraundu zuen jolasak. Continue reading
Ocala (Florida) , 1977
Hubo un tiempo que estuve perdidamente enamorado de una chica llamada Annie Hall; sí. Ocurrió en el año 1977, hacia el otoño. El mismo año que recién gobernaba el país un demócrata llamado Jimmy Carter. Yo por aquel entonces estaba, tras finalizar la temporada de Tampa, jugando en el Ocala Jai-Alai, en la Florida profunda, en el condado de Orange Lake, limitando con los de Alachua y Marion.
Pero no fue en Ocala donde yo conocí a Annie Hall, no; fue en Gainesville, un pueblo donde alquilábamos el apartamento ya que en la zona donde se ubicaba el frontón, en un punto intermedio a veinte minutos de Ocala y otro tanto de Gainesville, no había más que selva, ranchos, cabañas de pescadores y lagos con unos enormes caimanes y un calor insoportable; y mosquitos. Continue reading
Siempre me gustó su apodo: «Cuartillo». Recuerdo haber preguntado en alguna ocasión de donde le venía el mote. De Mallorca, de su estancia en tierra balear, me dijo alguien. Algo así como que debió de pedir un cuartillo de vino en un bar y desde entonces se quedó con «Cuartillo». Seguro que «Gari» conoce al detalle la anécdota o sino «Kapela» que también estuvo en Mallorca. Lo cierto es que en nuestro colectivo no será el único caso que la anécdota crea el apodo. Me viene a la cabeza «Taxi» Alberdi al que en Canarias algunos compañeros le vieron llamando a un taxi»: ¡»Taxi!… «¡Taxi!… y desde aquel día Cruz Alberdi se quedó con: «Taxi». Continue reading