Gernika Jai Alai, festival a favor del Asilo Calzada: frontón lleno. Markina, «día del Carmen», festival con aficionados y profesionales: buena entrada. Hondarribia, final del primer torneo Pro-Tour, buena entrada. San Juan de Luz, final de torneo: 1.500 personas en las gradas. En Biarritz, en breve, ocurrirá otro tanto, llenazos, gran ambiente… Así en diferentes plazas. En definitiva, lo que viene siendo habitual en los últimos años, actividad frenética durante dos meses, sinónimo de que la modalidad sigue viva y, de esta manera, el corto plazo está asegurado. A riesgo de caer en la auto complacencia.
En todos estos festivales hecho de menos el protagonismo de los pelotaris. Me da la impresión que están relegados a un segundo plano. El festival pro-Calzada fue un éxito por segundo año consecutivo. Se colgó el cartel de «no hay entradas». No estuve presente pero por la información facilitada se revivieron días de gloria. La gente, el pueblo de Gernika en parte, acudió a la llamada de apoyo a la institución; los jóvenes, atraidos por el ambiente festivo.
Sin embargo, echo de menos el protagonismo de las figuras. Erik y Diego han sido los grandes rivales en Dania. Los dos han peleado por hacerse con el número uno en la delantera. Por qué no revivir esa rivalidad trasladada al majestuoso Gernika Jai Alai? Reeditar aquellos duelos entre Katxín y Txikito. Que no sea tan solo la fiesta la que atraiga al publico que llenó las gradas. El envoltorio que no minimice el contenido.
Donde más patente queda la difuminacion del pelotari es en Iparralde. Me da la impresión que juegue quien juegue se llenarán las gradas. Porque el público acude, la mayoría al menos, no a ver jugar a Irastorza, sino atraidos por un festival típico del Pais Vasco. Un enfrentamiento entre francos y españoles. Acompañado de la parafernalia folclórica, gastronomía incluida.
Se lesiona un pelotari. Se le substituye por otro. Como se hacía en Florida y se sigue haciendo. Sin seguir más criterios que la disponibilidad en un momento dado. Puede ocurrir en Gernika; en Hondarribia; pasa lo mismo en los frontones al norte del Bidasoa.
En el festival «Calzada» homenajearon a «Txino» Bengoa. Uno de los «ases» de los años sesenta y setentas. En esa época la gente acudía a ver jugar a las figuras. No habia más envoltorio que la calidad de los que componian la élite. A dia de hoy, sin envoltorio, ningún puntista es capaz de atraer a más que unas decenas de incondicionales.
Estos sistemas de fiesta; es decir, de DJs y gastronomía, son inprescindibles para atraer al público pero corremos peligro de ningunear a las figuras.
El establecimiento de un ranking sería un gran paso para determinar quien es quien en esto de la cesta-punta. Que accedan a los torneos los que consigan encaramarse en los puestos de arriba. Ahora bien, cómo se consigue esto, me pregunto. Con los frontones de Iparralde no creo se pueda contar. Se encuentran en una zona de confort que cualquier movimiento les incomodaría.
Son las dos promotoras de Hegoalde, Gernika Jai Alai y Jai Alive, las que pueden maniobrar para establecer criterios homologables a otros deporte donde envoltorio y contenido sean no solo compatibles sino imprescindibles.
Espero que el Master Series organizado este año por Jai Alai World Tour, donde se medirán los mejores de ambas promotoras, sea un primer paso.