La noche del día 31 de diciembre no fue una noche cualquiera en Dania Jai-Alai para los 22 componentes del cuadro. En esa función, la última del año 2.022, se disputaban los últimos puntos para ocupar uno u otro lugar con el que optar a disputar el Dania Invitational Tournament.
Los partidos comenzarán el proximo jueves, en una sistema de eliminatorias a partido único hasta llegar a la gran final el 27 de enero. Esa noche pasada, la del 31, seis pelotaris quedaron descartados del torneo.
Pongamos en contexto la situación. El año 2.021, en noviembre, cerró sus puertas Dania Jai-Alai. Aparentemente para siempre. Una mala noticia, una pésima noticia. Una año después, sin embargo, con un torneo en abril de por medio, el Palacio, o lo que queda de él, habría sus puertas. Una buena noticia.
De acuerdo, la temporada es corta, dos meses. Pero las ganas enormes. Un cuadro compuesto por jóvenes que quieren agradar. Dos meses en el escaparate. La disputa de un campeonato con un premio de 5.000 $ a la pareja ganadora. Nada del otro mundo, pero otorga prestigio. Siempre es agradable ganar para estrenar o engordar el palmarés.
Los elogios de los aficionados que acuden al Palacio del jai-alai son unánimes. El cuadro es competitivo. La temporada so far estás siendo un éxito, las apuestas por encima de las expectativas. Parece que este año 2.023, a finales, habrá otra temporada de dos o tres meses. Y a los chicos se les ve felices. No creo que Benny, el intendente, tenga dificultades en completar el cuadro. Dos meses, o tres, no son muchos. Sin embargo, supone una gran experiencia para la mayoría. Para el jai-alai, en general, es una buena noticia. Su proyección fuera de Euskal Herria, si bien modesta, junto a la de Magic City, es un aspecto positivo. Yo así lo veo. Es, en definitiva, la suma lo que cuenta y de ahí la robustez de la modalidad a prueba del paso del tiempo. Y esa robustez es impensable sin su presencia fuera de tierra vasca.
La clasificación final después de la función quedó liderada en los cuadros delanteros por Zulaika con 225 puntos, seguido de Bixente con 204. Laduche a una distancia considerable. En la zaga Manci ha destacado por encima del resto con 220 puntos. En segundo lugar Bailo con 187 y Atain II con 184. Seguidos por Oyhenard con 168.
El sistema de puntuación se ha basado en otorgar 5 puntos por quiniela ganada; 3 por segundo puesto y un punto por el tercero. Asi durante todo el mes de diciembre.
El emparejamiento es el siguiente:
Los cruces: 1 contra el 8; 2 contra el 7; 3 contra el 6; 4 vs. 5. Partido unico a un set de 15 tantos.
Curiosamente se han clasificado 8 pelotaris de Iparralde y 8 de Hegoalde. Salvo las dos que van a disputar el primer partido este jueves. 1. Zulaika-Manci (Hegoalde) vs. 8. Etcheberry-Portet (Iparralde), el resto de las parejas van mezcladas.
A priori siempre hay parejas favoritas. Ahora bien, dada la composición del cuadro, la igualdad en el juego hasta la fecha, salvo unas ligeras diferencias —Zulaika y Bixente destacando en la delantera. Otro tanto Manci, Bailo y Atain II en la zaga— contribuyen a que el torneo se presente abierto. Además, no es lo mismo jugar quinielas que partidos, aunque sean a 15 tantos y a un set. La mayoría del cuadro está acostumbrada a jugar partidos.
Los pelotaris de Iparralde son muy competitivos. Juegan con un arranque inusual. Son atrevidos y lo hacen con desparpajo. Como si no les pesara la presión. Es cierto que salvo Bixente, el resto de los delanteros hacen y deshacen. El remate espectacular mezclado con una pifia. Pero son fieles a ese estilo.
Bixente es diferente. Lo hace todo bien, hay intencionalidad en cada lance del juego. Le falta garrote, ese poder necesario para destacar y competir en la élite, pero como dice mi amigo Steve, he is got all the tools. Dispone de todas las herramientas. Es un pelotari listo, de los que te roba la cartera antes de que te enteres.
Me encontré en las gradas con Peio Abeberry, el hijo del llorado Jean Pierre, de visita en el sur de la Florida. Me sacó de dudas. Todos estos chavales de Iparralde juegan todas las semanas durante todo el año de dos a tres partidos en diferentes torneos. Combinan la actividad deportiva con sus respectivos trabajos.
¡Ajá¡… pense entre mi. He ahí la respuesta. Es imposible rendir como lo hacen con cuatro ensayos cada x tiempo. Hay muchas horas de cancha de por medio. Son, la mayoría, jóvenes de poco mas de 20 años con mucho margen de mejora. Es cierto. No es fácil llegar a Florida y jugar quinielas. Pero tienen a su favor un espíritu competitivo marca de la casa, Iparralde, que les ayuda.
El resto del cuadro, 13 pelotaris de Hegoalde, lo conforman pelotaris experimentados: Arrieta, Zulaika, Iturbide, Bailo, Urbieta… mezclados con jóvenes: Mandiola, Danel, Urreisti (18 años), Goenaga, Manci, Aaron, algunos de ellos llamados a ser figuras como es el caso de Atain II (18 años).
El estreno del Dania Invitational este próximo jueves se presenta muy interesante. Zulaika y Manci contra Etcheberri y Portet. Un Hegoalde contra Iparralde, un derbi en toda regla. La diferencia en la puntuación es engañosa, no refleja la igualdad entre las dos parejas. Pero habrá que verles a 15 tantos, con la presión añadida que supone el que de perder te quedas eliminado.