Es viernes noche y Benny Bueno (Brooklyn, New York, 1964) tiene prisa. La función hace media hora que ha comenzado y Benny ha estado colaborando como comentarista en la retransmisión en directo que se ofrece a través de YouTube.
«Sólo unas pocas preguntas», le digo.
Pensaba que la entrevista iba a ser en su oficina, la del intendente. Un puesto ocupado en el pasado por gente ilustre como Salsamendi, Andrinúa, Fernando Orbea, Ondarrés o Arregi; antes de que Benny Bueno se hiciera cargo de la intendencia, el año 2.010.
Pensaba comenzar la entrevista con un: “si estas cuatro paredes hablaran”…
Pero no, nos sentamos en el cuarto del pelotero. Un sitio tranquilo donde poder conversar.
“No creas”, me dice Benny con una sonrisa, “si estas cuatro paredes hablaran también”…
El año 2.009 Benny estaba al cargo del programa amateur que tenía Dania Jai-Alai. A sabiendas de Arregi tuvo contactos con la empresa para dar su opinión sobre el jai-alai. 25 años como pelotari profesional lo avalaban.
Era una época en la que el cuadro lo conformaban 45 pelotaris, se jugaban once meses al año y los sueldos eran buenos.
Al año siguiente, 2.010, Benny asumió la intendencia tras retirarse Arregi.
“Arregi me leyó la cartilla. Qué hacer, qué no hacer. Con él había mucha disciplina, las reglas eran muy estrictas. La tensión era innecesaria. Yo quería un cuadro más relajado, más divertido”.
A Benny no solo le tocó rebajar la tensión. También los sueldos y recortar el cuadro. Hasta el 2.014 en el que se cerró el frontón para acometer las obras que lo reconvertirían en un casino.
“Mi esperanza era que el casino iba a traer más gente al jai-alai. Gente que nunca había visto jai-alai. Desde el día uno les dije a los dueños. Este casino tiene algo que ningún otro casino tiene en los EE UU. Podemos aprovecharlo”.
¿Después de 12 años sigues pensando lo mismo?
“Yo creo que ahora más que nunca, porque ahora he visto que el frontón cerró en noviembre y hay gente que me ha dicho que no habían estado desde entonces”.
Le pregunto sobre el cierre del frontón en noviembre del año pasado, 2.021.
“Una desgracia. Llevo 25 años de pelotari. Nosotros (los pelotaris) pensamos en lo nuestro. La cancha, la pelota, el boleto, la salud… esas cosas. Yo como intendente seguí pensado así por 10 años. Todavía pensaba como un pelotari. En las reuniones con los dueños me miraban como que yo siempre protegía a los jugadores primero; después al negocio. Y me han dicho que hasta que aprenda que el negocio mantiene la pelota, yo no iba a ser un buen intendente o un buen empleado. En 2.018 cuando cambiaron los dueños y los gerentes en este edificio me pusieron delante de los números”.
Los números según asegura Benny, eran demoledores. Desde que el grupo argentino compró la empresa, perdieron un millón de dólares al año con el jai-alai.
“Cuando en septiembre del año pasado anunciamos que se iba a cerrar el frontón, la intención nunca fue de que desapareciera el jai-alai, la intención de los dueños, ni la mía. Tristemente todo el mundo se lo tomó como la muerte del jai-alai en EE UU. Dania, el último frontón de granito y que ya no iba a haber jai-alai tradicional… Todo el mundo se fue de aquí triste”.
Sin embargo, la primera cosa que le comunicó la empresa a Benny fue: “¿Ahora qué vas a hacer?
Empieza a inventar qué piensas hacer. Cómo lo vas a hacer y ven con los números”.
“Ok. En enero arrancamos el año nuevo y ahí entró la idea de hacer un torneo, el Battle of the Palace, una serie de partidos con jugadores de buen nivel y me dieron un presupuesto de 35.000 $.
De los 35.000 $ presupuestados recuperaron 15.000. Asumían una pérdida y no lo tomaron como algo negativo. La lección fue que si iban a organizar un evento tiene que haber apuestas porque la apuesta ese lo que trae el dinero extra, según Benny.
En opinión del intendente es preferible gastar ese dinero en extender esos dos meses de temporada e invitar a más pelotaris y ofrecer más dinero en boleto (premios asignados a los pelotaris por ganar la quiniela, por el segundo y el tercer puesto)..
El balance de lo vivido hasta ahora, las tres primeras semanas de temporada, es positivo.
“Yo creo que estos dos meses van a ser un éxito”.
Has completado un grupo de 22 pelotaris que están mostrando un nivel de juego notable.
“Al principio el pensamiento era traer a los nombres. A los fanáticos que los quieren ver en tierra americana. Fue una decisión mía. El año pasado terminado Dania empezó a jugarse en Gernika el Winter Series. Un éxito muy grande. Yo hablé este año con los pelotaris estelares que no sabían si iba a ser incluidos. Yo hice la decisión de que iba a buscar los pelotaris que no iban a jugar el Winter Series. Algunos querían venir y yo también. Al final se iban a mezclar las cosas para ellos un poquito. Mejor yo dije, vamos a seguir para adelante con su éxito y yo voy a buscar a otros con mis contactos en Markina, Gernika y en Francia”.
La empresa le puso una cantidad de dinero. “Esto es lo que tienes para gastar en pelotaris”.
Era menos de lo esperado por Benny.
“Les propuse subir la cantidad. La mayoría venían de allá. Por dos meses, la casa, el coche, el vuelo. Todo cuesta más en invierno. Nadie se va a hacer rico, van a tener una experiencia de primera. Encantarles lo que les pasaran estos dos meses y que quieran regresar el año que viene”.
¿Cómo habéis gestionado el tema de los visados?
“Nos salió de chiripa. Volviéndome loco. Un contacto con un abogado experto en inmigración dio con la solución. Hay unas leyes que permiten a los deportistas venir a los EE UU. Jugar un campeonato. Ganar sus premios. Y no necesitas visa. Tiene que ser por menos de 90 días. No son empleados. No podemos pagarles un sueldo. Solo les podemos dar dinero en dietas. Luego están los premios. Legalmente ellos pueden ganar 5.000, 10.000 o 20.000 $ y no pasa nada. A nosotros con 60 días de temporada nos vino bien”.
Con este cuadro tan competitivo. Con el arraigo que ha tenido el jai-alai en Florida. Varios millones de personas que viven al sur de este Estado…, sin embargo, la respuesta en cuanto a afluencia de público es más bien floja. ¿Es porque no gastais en propaganda?
“Me río de la pregunta. Eso es como decirme: el número es 35 y decirme qué más qué llega a 35. Porque sabemos qué es lo que queremos ver, pero no sabemos cómo llegar ahí. Hace tres años en una reunión pedí 50.000 $ para hacer la promoción. La respuesta fue Ok. ¿Pero cómo los vas a recuperar o superar?
Lo de los 50.000 es lo de menos. La cosa es tirar más dinero al agujero o nos va a sacar del agujero.
Hoy en día la gente se queda en la casa. No van a venir a verlo en vivo. Está pasando con el beisbol, futbol. El jai-alai es barato, con 20 $ te sobra. Pero es la mentalidad. La gente no va al cine. La gente ve las quinielas por el teléfono. Llevo un año tratando de dar con la fórmula y está difícil”.
¿Se sabe el número de personas que sigue las quinielas por YouTube?
“En una función lo ven 1.000 personas. En directo 150 hasta 200 personas. Los apostadores lo siguen en vivo. El porcentaje de apuesta es: 25 % en el frontón. Otro 25 a 30 % en Connecticut. El resto por YouTube y en los sitios en los que hay señal, aquí en la Florida”.
¿Consideras que el modelo de apuesta tradicional, el de las quinielas, es un producto obsoleto?
“Ese sistema tradicional ha funcionado muy bien cuando no había otras cosas. En el 92 llegó el simulcasting. El porcentaje de lo que se apuesta fuera del frontón nos deja un 4 %. De cada 100.000 $ apostados en internet nosotros cogemos 4.000. Eso no paga ni el boleto de una semana”.
Contemplais algún cambio de formula? En Magic City han implementado el head to head. (partidos a seis tantos al ganador de tres sets).
«No sabemos lo que se genera en otros formatos. Están pagando (en Magic City) a 26 pelotaris por 52 semanas al año 200.000 o 300.000 en boleto, seguros médicos. Entonces, yo no se si estan gastando un millon y medio en gastos, o si el head to head les esta dando ese dinero de vuelta. Lo que se es que nosotros lo que hacemos con el parimutuel no es suficiente. Es difícil decir, lo voy a tratar por un año y ver qué se puede hacer. Yo no estoy convencido todavia si ellos están ganando dinero. Desde siempre he pensado que este deporte debe de estar televisado, con sponsors y se necesitan más frontones, equipos en otros sitios y se necesita encontrar dinero.
¿Esta garantizada la temporada para el 2.023-2.024?
«Hemos aplicado para diciembre y enero. Antes del 15 de marzo podemos hacer lo que queremos. 6 meses, 3 meses. Después de ese día solo podemos cambiar un 50%. Si llega el 16 de marzo, podemos quitar un mes o agregar otro mes.
«Desde la distancia, ¿cómo ves el boom del jai-alai en Gernika. Qué puede aportar Dania?
La formula allí es diferente. Primero, el jai-alai en el País Vasco es uno de sus deportes. Como la mano, el fútbol. El jai- alai es un deporte grande que tuvo sus buenos años y tuvo sus años malos. Y ahora creo que está dando la vuelta. Y en EE UU es un deporte más y la gente, desgraciadamente, lo mira como un deporte de apuestas. Cuando la gente va a Gernika y ve los partidos o en ETB, la realidad es que ellos están enfocados en lo que es el pelotari. Es el juego, la atmósfera. Pero aquí la gente piensa en apuestas.
Otra cosa es que en Gernika tienes a ETB, que es grande. Si tuviéramos nosotros un canal de deportes que nos apoyara, entonces daríamos ese paso hacia adelante. Y también el Gobierno Vasco tira un poco de ayuda con dinero y nosotros tampoco tenemos eso”.
Ha pasado más de media hora. Sé que le esperan en la cabina del anunciador. No le quiero entretener más. Colabora como comentarista los fines de semana en la emisión de las quinielas a través de YouTube. Más de 1.000 aficionados siguen en directo o en diferido las quinielas de Dania Jai- Alai y su trabajo, el de Benny, también consiste en divulgar el jai-alai y hacer pedagogia.
Me despido de Benny deseándole suerte para esta temporada y las que puedan venir