Charlo con un amigo treinta años más joven que yo. Es un gran aficionado a la cesta-punta. Sigue la actualidad puntista y no se ha perdido un partido del Winter Series de Gernika .
Me dice de buenas a primeras: “¿Qué te parece Aritz Erkiaga?”
Doy un respingo y tomo aire. Lo hago para ganar tiempo. No me quiero precipitar en la respuesta.
“¿Erkiaga?”, sigo rumiando la respuesta.
Un flasback me viene a la cabeza.
Hace cuarenta años me encontré con Elizondo, nuestro antiguo maestro nuestro en el frontón Beotibar de Tolosa. Era la época en la que Chiquito de Bolibar deslumbraba a propios y extraños.
“Rafael” ¿Qué te parece Chiquito?
No tardó en contestarme. “Mira. Es un gran pelotari. En cualquier época hubiera sido uno de los grandes. Lo que ocurre es que en mis tiempos había 4 o 5 como él”.
La respuesta de Elizondo sirve para contestar al amigo que me pregunta por Erkiaga.
Por supuesto que el de Ispaster hubiera sido pelotari de élite en los años setenta y ochenta, en Miami y en Hartford o en Bridgeport. Y seguramente en una época anterior.
Lo reseñable es que en ese tiempo había una partida increíble de grandes delanteros. Y de zagueros, por supuesto. Que también cuenta a la hora de valorar el rendimiento de los delanteros.
Una lista de delanteros a bote-pronto de ese tiempo: Juaristi, Joey, Katxín Uriarte, Zulaika, Mendi I, Asís, Alberdi, Rufino, Beaskoestxea II… Inclán… Sáez… Michelena, Egurbide y Ondarrés… (seguro que me olvido de alguno con derecho a integrar la lista).
No pretendo descalificar en absoluto a los actuales puntistas. Vivimos otros tiempos y la modalidad en número de pelotaris ha decrecido de manera brutal. En todas las categorías.
Aritz Erkiaga no solo es un gran pelotari, sino que su estilo de juego es cautivador. El de un artista. La palabra magia se está utilizando para describir el juego del delantero de Ispaster.
Ahora bien, todo hay que decirlo. ¿Qué ventajas ha dado Erkiaga a lo largo de su carrera? Sin ir más lejos, ¿qué ventajas ha dado Aritz en este pasado torneo Winter Series? Ninguna. Zabala, su zaguero, ha sido la revelación, la sorpresa de la final.
No pretendo sentar cátedra, es mi opinión, una más de las muchas. Pienso que el de Ispaster se ha beneficiado del tipo de pelotas que se han empleado en ese torneo. Un material más bien bajo para lo que estábamos acostumbrados en los últimos años.
Un material, el de Gernika, idóneo para jugar a la pelota como se jugaba “antes”. Nada de pelotas saltarinas ni escapadas. Un material para jugar al ABC de la pelota. Trabajar el tanto para, una vez dominado, acabar con jugada. Una forma de jugar que premia las virtudes y castiga las carencias.
El material empleado ha ayudado a mostrar un nivel de juego aceptable en el pasado torneo de Gernika.
Por otro lado, Goikoetxea con más pelota hubiera hecho más daño, las tarascadas del coloso de Zumaia son letales con pelota viva.
El calendario que han presentado para este año con el Jai-Alai World Tour se presenta interesante. Los pelotaris de élite van a contar con más oportunidades de demostrar su nivel de juego. Veremos si Erkiaga es capaz de demostrar que es el número uno dando ventajas. O bien que Goikoetxea o algún otro ocupe ese puesto.
Otras canchas en otros frontones, con características diferentes, sobre todo de material pueden hacer inclinar la balanza a un lado o a otro.
La rivalidad entre los dos primeros espadas está servida. La temporada no ha hecho más que empezar.
“¿Erkiaga? Un fenómeno en cualquier época”.